Los Reyes Magos de Oriente.

La ilusión, crea esperanza; y un corazón con esperanza; es un corazón que sueña y que persigue todo aquello con lo que sueña.


La ilusión es tan poderosa como la fuerza de voluntad. Creer, nos llena de alegrías. 


Creo que por eso existen los Reyes Magos. Ayudan a crear un corazón soñador y luchador en los niños que los esperan cada 6 de enero. Me encantaría que todos los niños del mundo tuvieran una ilusión como esa, pero no puedo cambiar el mundo con solo desearlo.


Lo único que está en mis manos, es seguir cuidando mi corazón ilusionado para desear con todas mis fuerzas que un día, de verdad el mundo cambie para bien.


Yo creía en los Reyes Magos, pensaba en ellos como seres mágicos y extraordinarios. Al final resultaron serlo, resultaron no solo ser los tres Reyes de Oriente que me daban algo en que creer. Fueron los que cuidaron esos sueños y los velaron con tanto ímpetu hasta que tuve la suficiente edad para luchar con uñas y dientes por ellos. Resultó que los Reyes Magos, no solo cuidaban mi alma, también la alimentaban y trataban de cuidarla de todo lo que le hiciera daño, no siempre lo lograron, algunas veces, aún con toda su magia vi el lado oscuro de las cosas pero siempre había un lugar en donde me podía reconfortar.


Pero, el tiempo pasa y la edad nos alcanza, un día deje de recibir regalos aún así nunca deje de creer. Todos necesitamos creer. Las ilusiones son poderosas, nos dan algo a que aférranos y aunque no todo depende solo de soñar, tenemos que admitir que soñar es maravilloso.


No importa si tienen 80, 50 o 30 años, nunca dejen de creer, en éste mundo tan lleno de grises y horrores, creer siempre nos permitirá tener un espacio para consolarnos, reponernos y resurgir como un fénix de entre las cenizas. Así que... Crean.


Hasta la próxima.


PD. Gabrielle muchas felicidades, ganaste regalito bloguero, no tardas en recibirlo.


La ilusión es tan poderosa como la fuerza de voluntad. Creer, nos llena de alegrías.
La ilusión es tan poderosa como la fuerza de voluntad. Creer, nos llena de alegrías.