Nuestras alas.

Alguna vez se han detenido a admirar las aves que surcan por los cielos, con el aire filtrándose en sus plumas y la libertad justo frente a ellas.

 

Un día aprenden a volar, y se pasan la vida volando. Desafiando la gravedad. Son un espectáculo de luces, contrastando al sol y de sombras proyectadas al suelo.

 

Fíjense en las aves y verán, solo confianza y seguridad. Confían en sus alas, confían en sí mismas.

 

Atraviesan los cielos, de ciudad en ciudad, de un polo a otro y confían en que sus alas los llevarán al lugar donde quieren estar. Cómo si el viento les susurrará, confía en tus alas y llegaras. 

 

Se posan en las ramas de los árboles, gruesas, delgadas, pequeñas o muy anchas, sin detenerse a medirla, sin temor a que se romperá, porqué si se llegará a romper nada les pasará. No depositan sus habilidades en la rama, si no en ellas mismas y sus alas. Así que no caerán al suelo aun cuando la rama se rompa, extenderán las alas.

 

Así debemos aprender a confiar en nosotros, aún sin tener plumas de muchos colores. Nuestra confianza en nosotros mismos, serán nuestras alas.

 

En nosotros está la clave de todo lo que podemos lograr, de las cosas que podemos conquistar y de los sueños que nos atrevemos a tener. Hay que aprender a conocer nuestras fortalezas y debilidades, ceder a ellas; basar nuestra confianza en la realidad y mirarnos al espejo tal cual somos; ahí inicia la travesía hacia cualquier conquista que queramos emprender.

 

Renegamos de nuestros defectos y tratamos de ocultarlos, creyendo que así desaparecerán y nos harán más livianos al abrir nuestras alas y volar. Nuestros defectos no nos hacen más pesados para el vuelo, nos harán más precavidos en nuestro viaje.

 

Tener fe en nosotros mismos, es la magia más poderosa de todas, cuándo creemos en nosotros no hay cadenas que nos detengan ni jaulas que nos contengan.

 

La libertad está destrozar las cadenas del miedo y surcar cualquier cielo. Todo comienza con las palabras: confió en mí.

 

Ustedes, ¿confían en sus alas? Los leo en los comentarios.

 

 

Hasta la próxima semana.